¿Te cuesta ir al baño? Si quieres saber algunas recomendaciones generales para mejorar esta situación, ¡sigue leyendo!
¿Qué es el estreñimiento?
El estreñimiento ocurre cuando la frecuencia con la que defecas disminuye o cuando las heces se endurecen y se hace más difícil evacuar. Según la OMS, se considera que una persona padece estreñimiento si hace deposición menos de 1 vez cada 3 días o le cuesta trabajo evacuar las heces más de una de cada cuatro veces que va a defecar. Hablaremos de estreñimiento crónico si esta situación se prolonga en el tiempo más de tres meses.
¿Por qué ocurre?
En ocasiones, puede ser causado por enfermedades o medicamentos que modifican el movimiento normal del intestino o el tono muscular (cáncer de colon, demencia, esclerosis múltiple, antidepresivos, etc.). No obstante, en la gran mayoría de los casos se debe a una ingesta de líquidos insuficiente, al sedentarismo o a un patrón alimentario poco adecuado.
Si presentas sangre en las heces, sangrado por el recto, dolor de abdomen constante, fiebre, vómitos o pérdida no intencional de peso, deberías consultar a tu médico para descartar la presencia de una patología que pueda estar alterando tu patrón de evacuación.
En caso contrario, deberías plantearte cambiar tus hábitos porque lo más probable es que tu estilo de vida sea lo que te esté haciendo enfermar.
¿Qué puedo hacer para evitarlo o mejorar mi situación?
El tránsito intestinal es el tiempo que tardan los alimentos desde que los ingerimos hasta que los desechos llegan al ano. Hay personas que tienen un tránsito intestinal lento y esto genera que algunas de ellas acaben padeciendo estreñimiento. Para tener un tránsito intestinal adecuado debemos mantener hábitos de vida saludables. A continuación, te dejamos algunos consejos:
- Adoptar un horario regular para la defecación. Es importante que acudamos al baño a la misma hora y, sobre todo, que no ignoremos el reflejo natural del intestino cuando nos avisa para ir de vientre.
- Aumentar el consumo de agua. La deshidratación es una de las principales causas de estreñimiento. Si aumentamos la cantidad de líquidos que ingerimos en forma de agua, ayudaremos a reblandecer las heces y facilitaremos así su expulsión.
- Comer más alimentos con fibra. Las frutas (como frutos rojos, manzanas con piel, naranjas y peras), verduras (como zanahoria, brócoli, arvejas, y hojas verdes de berza) y frutos secos (como las almendras) son alimentos ricos en fibra. Aumentar su consumo hará que mejoremos nuestro tránsito intestinal.
- Practicar ejercicio físico de forma regular también puede ayudar a regular el ritmo defecatorio.
- Disminuye el consumo de ultraprocesados. Este grupo de alimentos no aporta ningún beneficio a nivel nutricional y, debido a su elevado contenido de azúcar y grasas de mala calidad, y a su escaso contenido en fibra; consumirlos de forma regular puede agravar el estreñimiento.
En ocasiones, se prescriben laxantes para tratarlo. No obstante, utilizados de forma incontrolada y sin prescripción médica, pueden producir consecuencias serias para la salud y, a la larga, agravar el estreñimiento. Por ello, siempre recomendamos enfocarnos como primera línea de tratamiento la modificación de nuestros hábitos de vida. Si además de modificar tu alimentación quieres ayudarte con algún suplemento, recomendamos las sales de magnesio, que actúan favoreciendo las deposiciones. No obstante, están contraindicadas en insuficiencia renal y cardíaca crónica.
Como siempre, todo va a depender del contexto, el historial clínico y la persona que acuda a consulta. Por eso, si necesitas ayuda, debes ponerte en manos de un profesional. En Vitaltrain podemos ayudarte con nuestro servicio de nutricionista en Valencia, contáctanos.